Santander, una ciudad de sobra conocida en la costa norte de España. Una ciudad que tiene mucho que ofrecer tanto para grandes como para pequeños, es decir, siempre tiene algo para todo tipo de gustos. Por eso si buscas un lugar en donde descansar pero a la vez conocer lugares interesantes, este es tu destino. Además, si estás buscando un hotel en Santander centro ahora mismo te ofrecemos el mejor alojamiento de la ciudad, para que tu viaje vaya de maravilla.
Para empezar a disfrutar de esta ciudad cantábrica, tal vez la mejor idea sea pasear por su casco histórico. Enseguida te enamorarás de la Plaza Porticada o, también llamada, Plaza de Pedro Velarde.
Muy cerca de la plaza se encuentra el Mercado del Este, una galería comercial con todo tipo de comercios.
La Plaza Pombo y su dominante Casa Pombo del siglo XIX, fue en el pasado residencia del Marqués de Pombo. Es objeto de muchas fotografías, tanto de fotógrafos profesionales como de amateurs.
A sólo 2 minutos andando podemos observar la Plaza Cañadío, con la Iglesia de Santa Lucía, de estilo ecléctico. Aconsejamos visitarla y quedarse prendado no sólo de su exterior, sino también de sus interiores. En ella se guardan algunas obras de valor que merecen la pena ser visitadas.
En otra parte diferente, pero también en el centro de Santander podemos ver la Iglesia del Sagrado Corazón, perteneciente a la obra de los Jesuitas. Entra y descubre sus frescos así como también otros tipos de arte en el interior.
Nuestro paseo por el centro de Santander lo terminamos en la Plaza del Ayuntamiento, con su majestuoso edificio que data del año 1907, de estilo también ecléctico. Una plaza siempre llena de vida que da lugar a numerosos eventos a lo largo del año.
Un hotel en pleno centro de la ciudad
El centro de la ciudad de Santander ofrece muchos lugares interesantes y, paseando por sus calles, descubrimos más de lo que podríamos imaginar. Si queremos estar bien preparados para otros de los eventos que la ciudad ofrece, necesitaremos parar un poco, descansar y recargar energías.
Para eso no hay nada mejor que alojarse en el Hotel Silken Coliseum Santander.
Así es, muy cerca de la Plaza del Ayuntamiento, en la Plaza Remedios puedes encontrar este perfecto hotel de 4 estrellas.
Aquí puedes reservar habitaciones con vistas al centro histórico y disfrutar de los excelentes servicios que ofrecen. Por ejemplo, garaje privado, que podrá ser de utilidad sobre todo si aparcas en el mismo centro.
Y, si no te es suficiente el movimiento por toda la ciudad y dispones todavía de energía, puedes aprovechar el gimnasio del hotel, muy bien equipado, para hacer ejercicios de cardio o de musculación.
Continúa descubriendo Santander
Cuando estés listo para seguir descubriendo esta ciudad, Santander, y tras un agradable descanso en el hotel, no olvides hacer una visita a la Península de la Magdalena. Allí podrás admirar el Palacio de la Magdalena, tanto por fuera como por dentro. Alrededor suyo puedes pasear por un gran parque o disfrutar de sus preciosas vistas panorámicas.
Los turistas de Santander visitan con mucho interés a su vez la zona del Sardinero y sus playas. Da un paseo agradable durante cualquier época del año y disfruta de la magnífica atmósfera de este carismático lugar.
La Catedral de Santander, de estilo gótico llama también la atención de muchos viajeros. Entra y descubre un interior con numerosas joyas de gran valor.
Y, si a tu viaje le añades también la entrada al Museo Marítimo, llenarás todavía más tu mochila de buenos recuerdos. Aquí encuentras narrada toda la historia marítima del Cantábrico. Aprende y admira cómo vivían los habitantes marítimos gracias a este museo, y tu espíritu viajero se verá fortalecido.